En el mundo del retail y la publicidad en el punto de venta, el tótem de doble cara se ha consolidado como una de las soluciones más innovadoras para captar la atención del cliente. Su diseño inteligente permite comunicar dos mensajes distintos —uno orientado al exterior y otro al interior del local— en un único soporte de visualización. Esto lo convierte en una herramienta estratégica para maximizar la visibilidad en cualquier entorno comercial.
¿Qué es un tótem de doble cara y cómo funciona?
Un tótem de doble cara está equipado con dos pantallas digitales, colocadas espalda con espalda, y con diferentes niveles de brillo: una pantalla de alto brillo orientada al exterior del escaparate (hasta 2500 nits) y otra con brillo estándar (500 nits) para el interior. Este sistema está pensado para un uso intensivo 24/7, soporta múltiples formatos multimedia y cuenta con sistema Android integrado, permitiendo actualizar el contenido fácilmente a través de USB o red WiFi.
Gracias a su diseño ultrafino y soporte metálico negro personalizable, encaja perfectamente en cualquier tipo de escaparate o área promocional. La facilidad de uso y la alta durabilidad lo convierten en una alternativa más ecológica y rentable frente a la cartelería tradicional.
Ventajas de integrar un tótem de doble cara en tu estrategia de marketing visual
La utilización de un tótem de doble cara aporta múltiples beneficios en el punto de venta:
- Visibilidad 360°: comunica mensajes simultáneamente hacia dentro y fuera del local.
- Ahorro de espacio: dos pantallas en una sola estructura vertical optimizada.
- Interactividad y dinamismo: reproducción de vídeos, animaciones o promociones en tiempo real.
- Gestión eficiente del contenido: gracias a su sistema operativo Android, se puede actualizar de forma remota.
- Ideal para campañas estacionales o flash sales, permitiendo cambiar creatividades sin impresión ni montaje físico.
Ya sea en tiendas de moda, centros comerciales, cadenas de restauración o concesionarios, este tipo de soporte está revolucionando la forma en la que las marcas comunican sus promociones.
La tecnología de visualización sigue evolucionando, y el tótem de doble cara es un claro ejemplo de cómo adaptarse a las nuevas necesidades del mercado. Una herramienta versátil, potente y eficaz para destacar en entornos saturados de información visual.
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